Saludos desde mi tostadora


A ver, a ver...díganlo conmigo: estoy en paz y armonía, estoy en paz y armonía, estoy en paz y AARRRGGGH!!!... ¡que paz ni que armonía, ni que ocho cuartos! El celular no para de sonar, se me acumulan los emails (de los cuales hay varios para preguntar cosas que YA contesté), resulta que no hay tomate para las hamburguesas y nadie avisó, mi hija de 3 años corre como loca por la casa rehusándose a vestirse (lo cual es gracioso, pero ya estamos tarde) y la computadora está actuando como tortuga de 140 años.

¿Te suena? Dime que sí, por favor. No quiero pensar que soy mi propio caso de estudio. Si estás en un punto como el mío, o has estado en algún punto de tu vida así, debes saber cómo se siente: te levantas en la mañana casi tan cansado como cuando te acostaste, las tareas mañaneras como vestir a los niños para el escuela se hace en modo zombie, el café y sus derivados son tus mejores amigos, maquillarte en el carro es una habilidad que califica como peligrosa pero no tienes de otra, tu oficina que antes te encantaba, ahora sólo quieres llegar, hacer tu trabajo y salir huyendo para llegar a casa a hacer comida y tareas. Y ni hablar de tener agenda social o regresar a hacer ejercicios como antes (sobre todo si tienes amigos que te cuentan que salieron a caminar a las 5:00 a.m y tu sólo piensas, "yo me acoste 4 horas antes")

Esto, mis amigas, es el "burnt out". Tal como la frase lo dice: quemado o chamuscado. Y aunque no lo creas, es una condición que ya muchos doctores reconocen. No es un estado de depresión porque puede parecer que estás deprimida, tampoco es una enfermedad o un síndrome, es simplemente un estado de estrés prolongado que sí puede tener efectos en tu vida: subir o bajar de peso, ansiedad, fatiga y cansancio, insomnio, pérdida de memoria y hasta deterioro del sistema inmunológico.

Yo he estado literalmente "quemada" varias veces en mi vida, y no es algo para hacernos de la vista gorda como con otras cosas. Mi mejor comparación, es como ir en un carro que tiene el tanque lleno de gasolina y tu tienes una lista de cosas por hacer. Sales con toda ilusión a hacerlas pero.... andas y andas sin parar y de repente, empieza a tornarse feo: el ruido te agobia, hay desvíos en el camino, accidentes en la vía y para colmo no puedes parar a almorzar. Así va cambiando tu humor porque sientes una mezcla entre ansiedad por terminar y ganas de dejarlo todo tirado y sin hacer. Luego llega el punto donde has hecho lo mismo día tras día sin parar consumiendo todo: gasolina, agua y tu buena voluntad. Veredicto: estás quemao'.


Salir a conquistar el mundo suena maravilloso pero podemos terminar como tostada quemada que ni raspándola te sirve. Buscando más sobre el término "burnt out", encontré el libro de la Dra. Jesse Lynn Hanley, Tire of Being Tired (título muy atinado); ella explica que hay diferentes niveles de chamusque y que al detectarlos podemos hacer algo al respecto. Primero, Muy Determinado: es el nivel engañoso donde sientes y crees que puedes hacerlo todo y andas como chiquillo en Red Bull. Segundo, Arrastrando: ya sientes el cansancio pero andas a punta de café y en la noche té de tilo para dormir. Tercero, Resbalando: ya estás tan ojerosa que pareces extra de peli de vampiros, andas o esquelética o rellena y estas perpetuamente de mal humor. Cuarto, Contra la Pared: ya tu cuerpo está reaccionando con dolores por todos lados, la memoria te falla y puede que te enojes o llores sin sentido. Y por último, Chamuscado: en este punto ya debes sufrir de ansiedad, insomnio, depresión y tienes el sistema inmune desajustado.

Si algo de lo que aquí te dije suena familiar, presta atención; no dejes que llegue al nivel que te consuma y te deje en cenizas. Renacer de entre las cenizas como el Fénix, no va a ser tan fácil, pero aquí te dejo unos consejos míos y los que recomienda la Dra. Hanley:

Chill Tip 1 - DI NO A LA DIETA: Lo primero que hacemos cuando nos vemos con libritas de más es ponernos a dieta sin saber que incita el sobrepeso. Si crees que estás comiendo a consecuencia de estar "sobregirada", hacer dieta soló terminará en mal humor y frustración al no lograr rebajar. Este no es el momento de dietas. En vez de esto, come más alimentos ricos en antioxidantes, fibras y mucha agua. Esto regulará tu cuerpo. Si agregas suplementos de Omega 3, también ayudarás a los dolores corporales.

Chill Tip 2 - BELLA DURMIENTE: en el mundo corporativo se aplaude e idolatran a aquellos que pueden trabajar a toda hora como robots cafeinados. Dejénse de eso, la realidad es que el sueño te mantiene inteligente, creativa y hasta bella. El que no duerme se quema. Aquí les doy una perlita de sabiduría que heredé de mi papá... mi padre fué un hombre que trabajó mucho y recuerdo claramente que tenía problemas para dormir (primordialmente por estar estresado) pero ese hombre jamás descuidó su siesta. Todos los días sin falta, tomaba un power nap después de almorzar. Unos 10 o 15 minutos y luego salía de vuelta a la oficina hasta las 8 de la noche. Les juro que se veía fresquito como en la mañana. Lo que quiero decir, es que debes tener un sueño reparador y si tu sueño nocturno no es el mejor, compleméntalo con una siesta si puedes o con 10 minutos que cierres los ojos y te relajes. Verás como se despeja la mente y el cuerpo.
Chill Tip 3 - LOS COME ENERGÍAS: estoy segura que esto lo tienes que haber escuchado en algún lado...hay personas y situaciones que agregan estrés en tu vida y que succionan energía. Ejemplos claros son: llevar horas metida en la computadora, esa amiga que se está divorciando y te llama para llorar todos los días o la oficina de a lado que están remodelando y sólo oyes el mazo tumbando paredes todo el día. La realidad es que estas cosas no se pueden evitar pero sí puedes tomar un break de ellas y contrarrestarlas: deja la pantalla y mira un rato por una ventana aunque la vista no sea diga de admiración es sólo para darte un cambio, llama a esa amiga que siempre te hace reír con sus loqueras y si hay mucho ruido, escápate unos segundos a leer dos páginas de un libro o caminar por un pasillo silencioso.

Chill Tip 4 - LA PAZ: y no me refiero a que te rapes el cabello y medites bajo un árbol o que practiques tanto yoga que pareces un mafá (aunque el yoga es una excelente manera de mantenerte en forma y sereno), me refiero a que optes por la paz. La vida nos pone a prueba a diario y no lo podemos evitar, pero sí tenemos la opción de cómo reaccionar antes estas cosas; puedes ser un casca rabias empedernido o simplemente decidir ser más optimista. Aunque no lo creas, tu estado mental influye en cómo manejas tu estrés. A veces sólo se necesita respirar profundo o sonreír un poco más. La práctica de la paz es difícil de ejercer así que de a poquitos está bien. Yoda de seguro aprobará.

Para cerrar les digo, que estar en el último nivel del quemado es tenaz... y salir de eso requiere de todo tu enfoque y decisión para volver a cargarte de energías para seguir con el día a día; no arrastrando la manta como dice mi mamá, sino con actitud y buena vibra. Mi mejor consejo es evitar llegar a ese nivel y el tip que siempre me ayuda aunque sea extremadamente vanidoso es: cuando estás depre, ¡no lo luzcas! Ponte ropa bonita, tu maquillaje y tus tacones (aunque quieras estar casi en pijama porque todo te da igual). El poder de verte linda en el espejo no tiene precio, y no linda para otros, sino para ti misma.


No dejen que se les quemen los bordes! Busquen su chill.

Hasta la próxima,

Yani